miércoles, 25 de enero de 2017

Desde adentro

Hoy he tocado mis miedos, mi fe, mi esperanza y la alegría de tener a quienes amo a mi lado.

Siento la libertad de voltear al cielo, de creer que Dios me ve, de encontrarles formas a las nubes y sentir en la cara el calor del sol.

Hoy cierro los ojos y se abre la ventana de mi vida entera, como una película encuentro instantes de amor, apoyo, risas, viajes, pláticas, consejos, aprendizajes, rencores junto el perdón correspondiente, un pasado que me formo pero no me limita a ser quien soy y muchos me define en mi presente ni en mi futuro.

Tengo la constante bendición de tener a mi familia de la mano.

He pasado por muchas cosas y hoy se presentan nuevos desafíos de fe, estoy a prueba en carne viva.

Mi corazón por instantes se detiene ante el futuro inmediato.

Hoy me doy cuenta que tener miedo y ser valiente es lo mismo, ambas se viven al mismo tiempo, con la misma actitud se enfrentan.

La vida es lo que ocurre a diario, las decisiones que tomo, como interpretó el cariño que se me entrega y como lo devuelvo desde adentro, con los sentimientos que me dicta el corazón.

Es más fácil sentir que pensar, pero es un hecho que hay que pensar para expresar lo que se siente, así no se cae en los resentimientos por tanta sinceridad que a veces no es buena.

La Paz y el amor van de la mano, la fe y la esperanza también, cuando las oraciones suben las bendiciones bajan y la familia que reza junta, dicen que permanece junta.

Son días de fe, de encuentro, de entrega sin medida de amor sincero, quien no pueda, mejor que no se acerque. Es mejor rodearse de personas empaticas que de amores convenencieros.

A los 40 desde adentro, desde mi más profundo interior experimento sentimientos que pensé no volver a sentir, el miedo y la fe se reconcilian de una forma muy extraña, entrego mi día a Dios desde la mañana hasta la noche, se, estoy segura que el arcoiris no tarda en salir, la comunión con el cielo cada día es más cercana, sé que me escuchan, que están conmigo, hay una luz, sé que pronto saldrá.

lunes, 23 de enero de 2017

Perdoname hija

Siempre he dicho que yo hablo en primera persona pues no puedo hablarte de otras personas mas que de mis experiencias.

Esto de ser Padres, a veces duele, seguir una intuición, cuesta mucho trabajo.

Me equivoqué, recapacite y en el resultado, lastime a mi niña, pero fue para su bienestar.

Mi hija queria hacer un cambio de vida, al principio su padre y yo dimos un no rotundo pero despues de analizarlo decidimos apoyarla.

Todo iba muy bien, de hecho todo salió muy bien y ella estaba feliz, pero la decisión implicaba que estuviera fuera de casa por mucho tiempo y por consiguiente iba a afectar muchos aspectos familiares, el principal, el distanciamiento, cabe decir que tiene 15 años.

Despues de pensarlo mucho decidimos que la seguiríamos apoyando en el cambio que ella quería (mas no necesitaba porque no comprometia ni su integridad, ni su felicidad) pero que seria en tres años mas.

Si, fui injusta, fea, hasta me sentí Cruela de Vil, la peor madre del mundo, egoísta por querer tenerla un poco mas junto a nosotros, pero nadie me dio un catalogo de "Como Equivocarse con sus Hijos y que Nadie Resulte Lastimado",  creanme que a veces hay que tomar decisiones importantes que son las que duelen mucho, pero al final del día y costando un poco de dialogo entre toda la familia, se pudo lograr entender.

Dentro de todo vi que tiene fuerza para levantarse de algo que dolió mucho, un golpe que nos hizo crecer un poco a las dos.

Son tres años de espera solamente que le van a dejar mas valores y recuerdos familiares, todo tiene un tiempo y para volar va a tener una larga vida sin sus Padres.

Confieso que tengo una hija muy buena, si lloró pero solo un rato, si, estuvo triste, pero solo fue un par de días, comprendió las razones que tuvimos para aplazar sus deseos y logró aceptarlo sin mayores dramas propios de la edad, hoy, sigue siendo tan feliz como siempre y la seguimos apoyando en todos su planes a corto y largo plazo. La comunicación fue vital, pero sobre todo fue el amor que sabe que le tenemos y que pudo justificar nuestra decisión.

Una amiga que quiero mucho me dijo: "Tu eres su mamá y tu decides"...pues si, se escucha muy frío y egoísta pero tiene razón, (mi amiga es un encanto de persona), no es lo que en este momento mi hija necesita, que duro cuando las lagrimas de quien más amo en el mundo las provoque yo, sin afán de haber sido egoista, al contrario, creo que junto con su Papá encontramos lo mejor para ella en este momento.

Ya pasó un mes del trago amargo y hay ocasiones en que me da miedo haberme equivocado, solo el tiempo lo dirá, además solo se postergo un poco, a cambio me dejo ver que mi niña es noble y que aunque si dio sus puntos de vista con su carita de decepción tuvo la sensatez de comprender a sus padres y aceptar de que solo es cuestión de tiempo para lograr todo lo que ella se proponga hacer.

A los 40 nunca me habia tocado ser la bruja mala del cuento, me costo muchas lagrimas tomar la decisión de parar el vuelo que mi hija creía necesitar, tan no fue así que sigue feliz, en el ínter se le han presentado oportunidades nuevas y emocionantes que no hubiera podido hacer, así que no le vino nada mal el no cambiar nada, se que va a crecer...lo hace diario, cada día es un día mas de independencia, de conocimiento, de confianza y de mas amor de los dos lados, se que no hay resentimientos, tampoco hubo egoísmo, solo un momento de reflexión, de amor y tal vez protección, verla crecer y estar con ella el tiempo que se pueda y Dios me de, ese, va a ser su mejor recuerdo.

 Te amo pajarita.



jueves, 19 de enero de 2017

En shock

Los últimos días me he lamentado mucho sobre lo que está pasando en mi país y a nivel mundial.

He visto en las redes sociales como todos son juez pero no son parte, todos tienen la verdad absoluta y no lo cuestiono pues cada persona es un mundo que nació con total libertad de elección, hasta no elegir es ya en sí una elección.

Y no vengo a dar clases de moral, ni de valores, esas convicciones son personales y trato de transmitirlas únicamente a mis hijos, pero tal vez es en eso en lo que todo el mundo se está equivocando, tal vez.

Si observáramos más al compañero, a la familia de la puerta de lado, al maestro, al político, al juez, al entorno que nos rodea, veríamos los verdaderos focos rojos que han provocado tanto daño en los últimos días.

La religión, esa no importa mientras no se dañe al prójimo.
El que toma, saquea y roba, aunque sea un pan que no sea suyo, es ladron.
El que miente, no es de fiar .
El que engaña, es traicionero.
El que perjudica, es malo.
El que atenta contra la vida, es un criminal.
El que copia,no es honesto.
El que pasa sobre otro para su bienestar, es un aventajado sin escrúpulos.
El que choca y huye, esta falto de ética y valor civil.

Por ahí escuché que a veces la justicia no alcanza y merece venganza...me horroricé...es muy profunda la diferencia y también es alarmante. Pero se siente bajo la piel de muchas personas en las últimas horas.

Habría que cuestionarnos...

Si hago algo, ¿me enaltece?
Si lo comparto ¿estoy dañando a terceros?
Si me decido ¿estoy honrando a mis padres? 
Si no me importa, ¿realmente me beneficia en algo?

Vuelvo a mi posición de siempre, no cuestiono la libertad de expresión de nadie, pero me molesta la frialdad, la facilidad con la el ser humano arroja piedras, no está demás pensar en circunstancias adversas, es más fácil señalar, ofender, lastimar y cuando conviene, esconder la mano.

Todos tenemos espejos, sería bueno voltear a verlo a profundidad de vez en cuando.

A los 40 me entristece el mundo, si claro haya un comenzar por nuestra casa, pero antes es fundamental comenzar por uno mismo. Creo que en los 70's era todo amor y paz, el lema viene bien esta noche. 

Gracias por compartir y por tu tiempo.





jueves, 5 de enero de 2017

Hasta pronto Sra. Anita ...Segundo aniversario del blog

Hoy este blog cumple dos años...veo para atrás y cuantas cosas han pasado, muchas pérdidas en el balance, ayer se sumó una más, la Sra Anita Cortés, mamá de casi una hermana para mí, voló al cielo, hace ya décadas literalmente que no la veía, pero fue de esas personas que dejaron huella, sobre todo en mi niñez, yo siempre fui muy flaquita de niña y cuando subía a comer con ella, a mí en especial me preparaba un platillo que se llama polenta, ella era Argentina así que me imagino que es algo típico de allá...francamente odiaba la polenta pero me la acababa.

También fui enfermiza de tos, y bajaba con mi mamá en las noches y me preparaba leche caliente con ajo...tal cual y encima le ponía miel de abeja, era una cosa horrorosa y también me decía me me comiera (si lean bien) un poco de Vick vaporub porque me hacía bien a la garganta, yo siempre la obedecí.

La recuerdo muy alegre, me enseñó el amor a los perros, cada que yo ayudo a un albergue me acuerdo de su gran ejemplo y entrega a ellos,recuerdo las reuniones con sus amigas y la pata de elefante, misma que me causaba curiosidad y que resultó ser una gran botella gorda de ron, la música de aquel entonces y también me enseñó un poco de las sumas, fue la primera amiga de mi Madre en convertirse en abuela y yo fui madrina de su hija en el día de su boda, son amigas que fueron familia al final de la vida.

Yo no sabía que estaba enferma de EPOC, ella jamás fumo pero sus amigas si y de aquel humo ella enfermo de los pulmones, que injusto se me hace, la recuerdo con su pelo corto y chinito, con el periódico en la panza bajo los pants para ir a caminar y sudar el gordito, su decoración muy de los años 70 cuando vivía en la ciudad y siempre una historia que contar de su patria.

A los 40, la recuerdo con mucho cariño y me río pensando en la polenta (misma que conseguí y le di a mi hijo chiquito porque no subía de peso) y en aquella leche horrorosa con la buena intención de curar a una niña con principio de asma, gran madre y excelente abuela, ojalá la hubiera podido ver después a lo largo de los años pero así es la vida, separa de forma física pero el corazón sigue unido,por el recuerdo y el cariño, estará ya de gran platica con mi Madre, rodeada de muchos perros que le esperan para recibirla, desde aquí mi respeto y oracion en este viaje que comienza y mi abrazo fuerte para mi querida Anita.