jueves, 21 de septiembre de 2017

¡Esto es México!

Me encuentro conmovida, triste, orgullosa, con esperanza, asustada...son muchos los sentimientos que hoy me albergan y estoy segura que no solo a mi, a todo aquel que es Mexicano y que esta viviendo lo que nos ocurre, este terremoto nos ha sensibilizado, mas bien nos hemos dado cuenta de lo que siempre hemos estado hechos, de un corazón fuerte, solidario que se está levantando literalmente de entre los escombros para dar su mano al que se encuentra abajo.

Hoy se abraza al vecino, al desconocido, al hermano sin importar que no lo sea, insisto siempre mucho en mis blogs, somos mas los buenos, estoy feliz viendo como los Millenials a  los que todos señalaban de apáticos y que me he cansado de defenderlos, como son los que están más organizados, como se entregan totalmente y sin reserva al necesitado, levantando escombros, armando cajas, juntando víveres e insumos medicos, haciendo cadenas de ayuda, ¡bien por ellos! ¡bravo por estos jóvenes! han callado la boca de miles de personas sin fe en ellos, la casta se trae, las sangre y el amor a su Patria los mueve, que orgullo debe de darnos esta hermosa generación, estamos viendo de lo que están hechos.

Dentro de la desgracia que es muy grande hay consuelo, veo personas rescatando animales, eso es tener el corazón bien puesto, todo lo que tenga vida conlleva un valor siempre.

Sobra la ayuda dentro de las universidades, se les dice que se vayan y ellos se quedan, dejan de lado el hambre, el sol y por la tarde la lluvia y el frío de lado, así como las personas en las calles, sobra la comida para ellos, eso quiere decir que el amor abraza a nuestro México.

Casa por casa, persona por persona, las cuarteaduras en las paredes están juntando nuestras almas, los albergues están vacíos porque los vecinos están abriendo sus puertas, compartiendo los hogares, el pan y la sal, me parece increíble, dentro de la pena hay brazos para consolar.

No quiero hablar de las noticias falsas o de los politicos ausentes, tampoco de los oportunistas que siguen robando, hoy no, lo bueno, la evidencia de lo demás aplasta todo eso... el tiempo acomodara a quien tenga que acomodar.

¿Quién iba a pensar que después de un simulacro iba a ocurrir un sismo de verdad?

El miedo pasa a una espera quirúrgica en medio de los recates, la fe todo lo puede y las manos todo lo alcanzan.

La esperanza que se respira es grande, mi México es puro corazón, no conozco a nadie que no este ayudando, desde un depósito hasta ir a cargar escombros, nada es pequeño cada quien como ha podido y todo se agradece, todo sirve.

A los 40 siempre me he sentido orgullosamente Mexicana porque lo soy, no importa de donde vinieron los abuelos o los padres, hoy y siempre SOY MEXICANA, aquí nací yo, he vivido en esta hermosa tierra que todo me ha dado, aquí crecí, nacieron mis hijos y mi amor, corazón, agradecimiento y ayuda hoy por hoy le pertenecen.

Sigamos levantándonos con manos y corazón, hoy es otro día mas para demostrarle al mundo entero de que estamos hechos nosotros los Mexicanos, de alma, fuerza y corazón.



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