Mostrando las entradas con la etiqueta respiración. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta respiración. Mostrar todas las entradas

jueves, 25 de febrero de 2016

Aquí observando

Aquí sentada observando, en paz, en silencio, cerrando los ojos y viendo mi interior, respirando y contactando conmigo, no te confundas, yo no se meditar, ni siquiera sé si esto que hago es meditación, pero me sirve mucho, de verdad contacto con el día, con mi cuerpo y mis emociones, siento lo que me acomoda y lo que me molesta, aquí es donde me detengo.

Lo que me molesta lo he ido trabajando, ese es un trabajo que solo tú puedes hacer, inténtalo, hoy ya son menos las cosas que no me hacen sentido, eso me trae a un estado de tranquilidad.

He soltado muchos sentimientos y he dejado ir a las personas que frenaban mi crecimiento tanto personal como espiritual, no que yo sea la persona más conectada en ese nivel, pero lo he encontrado  y me gusta como me percibo.

He puesto más atención a lo que sucede a mi alrededor y veo cómo los demás crecen o simplemente se estancan y se autodestruyen en sus mentiras y sus banalidades, seguramente los demás verán muchos defectos en mi también, pero no los desconozco, los estoy asimilando y corrigiendo desde el punto más sensible, desde mi infancia hasta mi presente, pasando por mis ausencias, mis errores y también mis aciertos.

Me abrazo internamente y me permito llorar lo perdido para abrir mis brazos a lo que tengo que recibir y los vuelvo a abrir para ofrecer también todo lo que puedo dar, mi compañía, mi empatía, mi apoyo y mi cariño para quien lo quiera tomar.

Consuelo aquella niña del pasado, no comprendo lo que le tocó vivir aún pero la rescato presentando la mujer que se refleja en el espejo.

La vida es, ocurre, solamente.

A los 40 no juzgo a nadie, cada quien sabe dónde han pisado sus zapatos, me permito voltearme a ver a ver para comprender, para perdonar, para avanzar y así poder llegar a mi interior, a mi alma, sin reproches y curando todo aquello que se tenga que resolver, amor con amor, mano con mano y de la mano de Dios.

lunes, 27 de abril de 2015

Sustos y diálogos internos

"El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son." Tito Livio.

Es increíble como un mal momento que paso hace casi dos años puede volver a cobrar vida en cuestión de minutos creando una sentimiento de ansiedad, angustia  y bloqueo.

El miedo es una sensación dañina y mentalmente peligrosa si no se sabe manejar y la manera en que se apodera de ti es verdaderamente espeluznante.

El miedo no es cuestión de terapia ni de sobreponerse a el, es cuestión de un paro en seco al corazón, es volver a vivir una pesadilla solo que en otra dimensión y cuando se presenta llega con una fuerza desconocida, de verdad se apodera de ti y de tu cuerpo sin pedir permiso, te paraliza y aquí viene lo mas impresionante, tu mente, si, tu propia mente se vuelve tu peor enemigo, trabaja a mil por minuto, comienzas a ver posibles escenarios, la mayoría negativos, comienzas a pensar soluciones, las más extremas y las que te resultan más rápidas, pides ayuda celestial, rezas y tu corazón late a mil por hora.

No es tema del pasado, en este momento se vuelve presente inmediato, sientes como el peligro rodea lo que mas amas, como una avalancha que no puedes evitar y el diálogo interno es intenso, duro, es imposible escapar de el, los recuerdos se agolpan dentro de tu cabeza pero ahora con una dimensión real, no quieres volver a pasar por lo mismo, quieres volar y proteger, si pudieras tele transportarte lo harías, pero eso no es posible, no es viable.

El miedo paraliza no solamente tu cuerpo, detiene el tiempo y alarga las distancias, no puedes respirar y tu visión se distorsiona, es momento de respirar profundo y pedir ayuda, a quien esté más cerca o quien pueda llegar antes.

A los 40 hay momentos que no se olvidan por mas que quieras, sustos que se presentan a revivir malas experiencias, aquí lo positivo es que solo se quede en un mal momento, hay que callar a la cabeza, terminar el diálogo interno y agradecer que todo quedo en eso, en una suposición con un leve fundamento.

martes, 31 de marzo de 2015

¡Un ataque de Ansiedad!

Los Ataques de ansiedad.   

Hay situaciones que te hacen sentir como que estas debajo del agua, sin aire, donde tu corazón palpita tan fuerte que parece que se va a detener, donde abres los ojos y solo ves borroso hacia la luz con una gran necesidad de salir y sentir como el aire entra a tus pulmones, hay mucha confusión.

Eso amiga mía puede ser un ataque de ansiedad, pánico o desesperanza, a los 40 pueden comenzar a aparecer y de verdad es horrible porque sientes que puedes morir en cualquier momento, tranquila, eso no sucede.

En esos momentos hay que tratar de estar lo mas consciente de lo que te pasa o que es lo que esta detonando esta reacción, a partir de ahí vas a poder identificarlo para en un futuro poder controlarlo.

Respira profundo y mentalizate que es algo pasajero, de hecho dura muy poco, el sudor frio que sientes va a detenerse, no te estas infartando, a menos que dure mucho y te duela la quijada entonces si corre al hospital.

Por lo general estos ataques se deben a que has sido muy fuerte durante mucho tiempo, digamos que es la factura a pagar, no es agradable, pero te garantizo que pasa, me ha ocurrido y de verdad pasa. Tampoco se vuelve una condición de vida, no es nada padre, pero si aprendes a identificar los detonantes puedes controlarlo.

Pon en la balanza  lo que te esté afectando lo mas seguro es que no valga la importancia que le estas dando y piensa en lo que realmente vale la pena, si necesitas llorar hazlo, va a ser un alivio, busca un abrazo, trata de no estar sola.

A los 40 hay muchos cambios y comienzas los hormonales, no te digo que a estos se les de la bienvenida, pero junto con tu Medico afrontarlos para que puedas sobrellevarlos cuando se te presenten.


jueves, 5 de febrero de 2015

Receta para el ánimo

Estar de buenas todos los días no es tarea fácil, hay muchas circunstancias tanto emocionales como ambientales que nos rodean que a veces hacen de la felicidad o del buen animo todo un reto.

Yo tengo menopausia por cirugía y pobres de mis hijos (jajajajaja), ya en serio la ansiedad y el insomnio aparece mucho en la semana y ahí es cuando hay que hacer labor de respiración, mis queridas Doctoras de Acupuntura me han enseñado a respirar y a estar bien emocionalmente hablando con sus agujitas, así que cuando hay crisis nada como una buena acupuntura para sacar la tristeza o angustia que llevas dentro.

Respira profundo, sostienes, exhalas hasta que sientas que tu estomago toca la espina dorsal, de paso le das masaje a tu espalda.

Otra forma es abrazar y que te abracen, nada como un buen abrazo que integre de nuevo todo tu ser  y se junte tu alma, pero cuando abraces que sea con los dos brazos no con uno solo, así no vale, un buen abrazo en un momento de tristeza, dice te quiero, aquí estoy, todo va a estar bien o también significa simplemente que me da gusto verte, los mejores momentos de la vida siempre vienen acompañados de uno, bueno te la pongo mas fácil, ¿a quien no le gusta que lo abracen en su cumpleaños?.

Otra forma muy efectiva de recuperar el animo es estar rodeada de la familia cercana, el sentir su compañía aunque sea en silencio o en medio de una buena charla da paz, te sientes integrado y muy querido.

Ahora, si no hay acupuntura, ni nadie que te acompañe o abrace un buen método que a mi me funciona (aunque no me lo creas) es ¡subir a un columpio, ¡si!  ¡No te rías! No es broma, te reto súbete a uno y columpiate muy fuerte, como cuando eras niña, siente como subes y bajas y tu estomago te llega a la cabeza cuando ya vas alto, de verdad es una buena sensación y quedas exhausta, te sientes feliz, no se como pero sacas todo, pero mucho ojo, nada de salir corriendo al carrito de los helados del parque porque ya sabes donde queda el helado jejejeje.

A los 40 realmente no creo tener la receta para el ánimo, pero creo que si unos tips muy buenos y divertidos.